jueves, 27 de mayo de 2010

Pausa estética: Un bel dì vedremo...

Se abre el telón. Finales del s. XIX, en la terraza de una casa japonesa sobre una colina próxima a Nagasaki, la joven Madama Butterfly contempla la ciudad a sus pies, el ajetreo de la vida en el puerto... y llenando de aire sus pulmones deja que su mirada se pierda entre el vaivén de las olas, mar adentro, en las profundidades de las aguas... hasta rasgar el horizonte. Ese mismo mar que se llevó a su amado F. B. Pinkerton se lo devolverá un día transformando la sal de sus lágrimas en canto gozoso.

Por aquel teniente de la marina estadounidense ella había renunciado a todo: costumbres, familia, amigos y hasta a su mismo Dios. Ahora sólo le quedaba aquel mar inmenso y ancho por el que "un buen día se elevará una columna de humo", la de la nave blanca en que marchó aquél que se había convertido en la razón de su existir.

Un bel dì vedremo
levarsi un fil di fumo
sull'estremo confin del mare.
E poi la nave appare.

La mantiene en pie la fe en una promesa, por la que "espera contra toda esperanza", que ahuyenta sus dudas y la hace ensordecer ante el titubeo y el miedo de su criada y confidente, Suzuki. La fe que le hace ver con la ceguera del corazón lo que la claridad de los ojos oscurecen. A pesar de todo... él volverá, "volverá con las rosas, en la estación serena en la que anida el petirrojo".

O Butterfly, piccina mogliettina,
tornerò colle rose
alla stagion serena
quando fa la nidata
il petti rosso.

Éste es el canto a la esperanza de la joven Madama Butterfly, inmortalizado por el maestro Puccini. La fe en una promesa no basada en lógicas humanas ni datos verificables, sino en una sola razón: la razón del amor, la certeza del que alguna vez ha gustado el amor, que enjuga las lágrimas y borra de nuestro paladar los sinsabores de la vida.

Un bel dì vedremo... Un buen día veremos... Y yo lo espero.

7 comentarios:

  1. Uffff jamás he logrado escuchar esta aria sin acabar llorando. A mamá le pasaba lo mismo...

    Bueno, al tema Mariluz... espero ser de las afortunadas en ver ese día.

    beso, guapo :)

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  2. uffff que deleite madame buterfly es un sollozo del alma quebrada me encanto besitos gaviota

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  3. Què maravilla!!!!!!!!! Sólo un alma enamorada puede cantar y esperar así. La belleza que mueve el universo.

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  4. Bueno, me alegro mucho de que os haya gustado. A los que no se nos ha concedido el don de la música, nos conformamos con saborearla. Hace una semana tuve la suerte de poder asistir a la representación de M. Butterfly en la ópera de Roma, y no podía quedarme sin compartirlo... Mariluz, te puedo decir que también lloré. Buen fin de semana a todos.

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  5. Una de las obras de Puccini que más me conmueve, es Madama Butterfly. El amor que siente Cio-Cio-San por el infame de Pinkerton,es tal vez, una de las mejores representaciones del Amor Incondicional.

    Mónica Gill


    P.d.: les dejo el link de mi blog si quieren escuchar la ópera entera:

    http://obsesionfatal.blogspot.com/2009/12/madama-butterfly.html

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  6. Bienvenida al Atrio, Mónica, y gracia por el link, tienes un blog que es toda una joya... Feliz domingo

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  7. Después de 4 noches intensas de trabajo... escucho esto y lo único que tengo ganas es de llorar... espero que sea por el cansancio...

    Precioso Rafa... precioso...

    bss a todos....

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